01/08/2025
Un corredor de bolsa que ostentaba una vida de lujo fue acusado de haber estafado hasta a su propia familia

Fuente: telam
Una pariente de Ignacio González Palumbo relató en Montevideo que el supuesto asesor le llevaba papeles, le comentaba las inversiones que había hecho y la hacía firmar asegurando: “Estás bárbara!”. Pero todo era falso
>La ahorrista Vivianne Yafe se indigna cada vez que ve al falso corredor de bolsa Ignacio González Palumbo por el barrio residencial de Montevideo Punta Carretas, manejando su BMW, como si nada hubiera pasado. Su enojo, según explicó en una entrevista con El Observador, está dado porque ese hombre que ostenta una vida de lujo aprovechó el vínculo familiar que tenían para estafarla. Y más le enoja que el caso no haya avanzado en la Justicia.
Esto provocó que 25 damnificados presentaran una denuncia contra este corredor de bolsa, que hacía su trabajo en representación del escritorio bursátil Pérez Marexiano. Pero en esta firma niegan el vínculo.
Yafe es una de las afectadas: González Palumbo se quedó con sus ahorros, con los que pensaba completar su jubilación de escribana y nunca más le atendió el teléfono. La mujer confió en el supuesto corredor de bolsa y le fue entregando, desde 2020, sumas de dinero que llegaban a los USD 100 mil. En teoría, estaba invirtiendo ese capital en distintas empresas que cotizaban en la bolsa de Estados Unidos.Cada tres meses, cobraba USD 540 y cada medio año USD 2 mil. A veces, el corredor de bolsa le daba algo más de dinero para que Yafe se fuera de viaje.
Cada tres meses, González Palumbo la visitaba y le mostraba los resultados de supuestas inversiones. “Me traía los papeles, me explicaba las inversiones que había hecho y me decía: ‘Estás bárbara, estás bárbara’. Me decía que tenía ciento y pico de miles de dólares”, relató Yafe.El operador tiene 38 años y está vinculado desde 2019 al mundo de las inversiones. Le gustaba ostentar una vida de lujos y llena de excentricidades. Manejaba autos de alta gama, que cambiaba dos veces por año. Alquilaba durante todo enero un inmueble en Punta del Este e iba a apostar varias veces por semana al casino del hotel Enjoy, donde le gustaba acceder a la zona VIP. Allí pasaba varias horas durante la noche.
Yafe estaba de viaje cuando se hizo público que todo era una estafa. Una amiga le avisó. Ella llamó a su familiar y le dijo que necesitaba USD 500 para pagar la tarjeta de crédito. El corredor le respondió que ese dinero estaba y se comprometió a devolverle el llamado. Pero nunca lo hizo. Ella intentó volver a llamarlo, pero el número daba error.La estafa la afectó física y emocionalmente: está jubilada de escribana, tiene 70 años y esos eran los ahorros de su vida.
“Me parece muy injusto que él siga tan tranquilo, la esposa alquila un apartamento en Solano Antuña [Punta Carretas], él sigue paseando en su camioneta BMW y ella en la suya. Yo ejercí 35 años como escribana y puedo asegurar que ninguna esposa es inocente. Indigna que a él ni siquiera le pusieron una tobillera, tiene solamente la obligación de no salir del país, cuando una pobre mujer que entra 10 gramos de droga a la cárcel termina presa”, comentó.Fuente: telam